Cuando me inscribí en el taller fue porque escribir siempre me gustó. Hace ya muchos años que no dejo pasar un solo día sin hacerlo. No escribo cuentos ni novelas y mucho menos ensayos sino interminables reflexiones acerca del sentido de la vida y afortunadamente me ha ido bastante bien.
Me llamo Emiliano y tengo unos cuantos años, tantos que ya no tengo obligación de votar ni de asistir a misa. En determinados horarios viajo en tren gratuitamente y hasta en ocasiones me ceden el asiento. Traté siempre de encontrar lo que de bueno podía tener aún aquello que parecía no tenerlo y en esta particular circunstancia la encontré. Mis nietos estudian por estos días online y ahora también yo y eso me hace sentir joven.
emiliano, me gustò tu estilo conciso, directo y sin embargo con una mirada tan esperanzadora
ResponderBorrar