Coctelera de chats - Darío

La vida a veces nos da muchas vueltas pero en mi caso siempre la combino con una canción, porque siempre está la música para hacer que esas vueltas no mareen tanto a las personas. Y sólo el hecho de intentar no dar esas vueltas en la vida, aunque quizás no lo parezca así, es un tremendo reto pero lo bueno es el desafío que eso implica.
Canción: A punto
Grupo: Amigos Raros
Te veo en un rincón
Vas destilando fantasía
Colgado de tu don
El mundo es tuyo y vas deprisa
Curioso y audaz
Me ofreciste consuelo
Inútil decirte que no
Sé que estoy a punto de perderme
Tu peligro me envuelve
Un fuerte frenesí condena mi suerte
Sé que estoy a punto de perderte
Tus ojos no me mienten
Salgamos ya de aquí, la noche se enciende
Yo, hundida en el fervor
Arriesgo lo que tuve un día
No pediré perdón
Si no contengo mi osadía
Y tú, ahí estás
Inquietante y sereno
Sabiendo tener el control
Sé que estoy a punto de perderme
Tu peligro me envuelve
Un fuerte frenesí condena mi suerte
Sé que estoy a punto de perderte
Tus ojos no me mienten
Salgamos ya de aquí, la noche se enciende
Sé que estoy a punto de perderme
Tu peligro me envuelve
Un fuerte frenesí condena mi suerte
Sé que estoy a punto de perderte
Tus ojos no me mienten
Salgamos ya de aquí, la noche se enciende.

Coctelera de chats - Ma. Teresa

MOMENTOS

—Buen día, familia.
—Buen día, amigos.
—Buen día, guapas.

Mis mejores momentos, al comenzar el día, los de los saludos. El tiempo que le dedico a las personas que más quiero: familia, amigos y guapas. Para los demás pareciera, tal vez, algo normal. Para mí no, porque ellos conforman mi universo. Con ellos, he reído, llorado, abrazado y tal vez, algunas veces, por qué no, también me he disgustado y reconciliado.
Mi familia, a la que extraño tanto en estos momentos... Cada semana se organizaba la juntada. Todos pensando qué se come y se bebe, quién se encarga de comprar. Mi obligación: las golosinas para el final de la velada, con el café. Un día dije "por algo especial quisiera que me recuerden" y surgió esa idea. Sería la abuela de las golosinas, las que nunca faltaban antes de despedirnos. Chocolates, caramelos (de los especiales), chupetines, bombones o confites. Siempre están.
Mis amigos, esos que conocí cuando mis hijos iban al colegio primario organizando el viaje de egresados... Y luego, por esas cosas de la vida, aun hoy seguimos compartiendo muchos hermosos momentos. Algunos han partido, pero siempre estarán en nuestros corazones.
Las guapas que, por supuesto, somos las damas del grupo de amigos... Ellos también tienen su grupo. Allí nos divertimos con alguna foto que nos alegre la vista o algún chiste de esos que solo nosotras sabemos escuchar. O simplemente un espacio para confidencias, algunas alegres, otras no tanto. O para preguntar "¿estás bien? Te siento la voz medio depre" y tratamos entre todas apuntalar el día.
¿No es un Universo Maravilloso el mío? 
Bueno ahora también los tengo a ustedes que, sin conocerlos, son parte de mis días. Y disfruto mucho leyendo sus textos. Pero estoy extrañando mucho, los abrazos y besos o una mano extendida para estrechar. Es algo que nunca pensé que me iban a faltar. Un vínculo creado a través de la tecnología no es lo mismo.
Perdón, si me he explayado demasiado con mis cosas. Pero es algo que necesitaba hacer y se me dio la oportunidad con esta consigna. 
Quisiera termina con una corta poesía:

Vive pensando alegremente
Disfruta el día 
Sueña, ríe, canta
Que la vida es bella
Observa y verás
Que tienes pájaros en los ojos.

Coctelera de chats - Norma

Siento que soy una privilegiada. Agradezco cada día el poder darme cuenta de lo simple, hermoso  y sano que puede ser nuestro devenir en este momento o en cualquiera en que vivamos. Este presente es bastante conflictivo para todo el mundo. Tratemos de tener la esperanza y la fe del resurgir. Positivos. Pero también empezar a respetar, cuidar y sanar nuestros movimientos, pensamientos y acciones. La naturaleza nos necesita, aboguemos en su favor y quizás estas agresiones y pestes abandonen nuestro territorio.
Para encontrar  la veta de la esperanza, necesitamos volcarnos  al color que el otoño nos dejó, con su hermosa paleta de colores. La pintura nos lleva a recordar esa magnifica e inagotable muestra de colores y sus mil matices. Hace unas horas, cuando publicamos nuestro trabajo semanal de fotografía, una compañera dejó en mí una fascinación con la foto de dos niñas pequeñas y rubias, ambas,jugando con las últimas hojas ocres amontonadas en la acera, cerca de los árboles cuyas ramas se destacaban por la absoluta ausencia de ellas. Absortas, ingenuamente atareadas en la tarea, formaban una imagen sublime, pictórica, digna de emular cualquier obra del siglo pasado o de alguna famosa pintura expuesta en algún museo europeo..
El arte en todas sus formas es la medicina natural que nos llena de gozo al disfrutarlo plenamente, y nos acaricia el alma a cada instante. El color inunda nuestros ojos y arriba muy pronto a nuestro corazón. Agradezco todo en la vida, también el poder discernir entre los colores, los pinceles  y la tela que está esperando ansiosa ser valorada con el amor de su dilecto amigo, el artista que la pueda crear.
Sí, parecían salidas de un cuento. No lo podía creer cuando las vi. Igual les saque con el tele desde el auto. Me gustaron todas las fotos, pero las nenas son un poema. Una belleza. Hasta los colores armonizan con ellas, tan rubias, y las hojas con esa gama de ocres: una pintura.
Y el último fue un video con la canción "Resistiré".

Coctelera de chats - Emiliano

Los clubes cumplían una gran función social que no se limitaba a la educación de los niños y los jóvenes a través del deporte ni era el lugar en el que pasaban el tiempo los mayores alrededor de una mesa jugando a las cartas. No, eran mucho más que eso. Los bailes hicieron que muchas parejas se conocieran, noviaran y hasta se casarán. Cuando mi tía Mafalda llegó con un grupo de amigas, vieron entrar a unos muchachos y discretamente empezaron a murmurar. Todas repararon en uno de ellos por el que se sintieron fuertemente atraídas, menos mi tía Mafalda que dijo  "con cualquiera menos con él". Cuando, después de cincuenta años de casados Roberto (que de él se trataba) falleció, mi tía no halló consuelo. Aseguraba que en ocasiones se le aparecía y charlaban. Roberto me confesó que hasta pasados los treinta años nunca había laburando y que vivía de las minas. Bien parecido, excelente bailarín de tango y seductor de profesión no le faltaban mujeres que lo bancaran. Solía tomar un café con él y cuando veía que yo me llevaba la mano al bolsillo me tomaba del antebrazo y me decía: "quieto pibe, siempre paga el mayor". En su homenaje hago lo mismo hasta el día de hoy. Cuando conoció a mi tía dejó la noche y se empleó en una empresa de seguros hasta que se jubiló. Cuando mi tía falleció fue para mí un duro golpe porque fue mi preferida. Lástima que no hice a tiempo para preguntarle en que estaba pensando cuando dijo "con cualquiera menos con ese". 
Esta historia es real y los nombres no fueron cambiados. Las personas no mueren cuando dejan este mundo sino cuando ya nadie se acuerda de ellos. Mafalda y Roberto viven en mi corazón.

Coctelera de chats - Claudia

—Mñn t llevo libros —le dije por Whatsapp.
Ella no contestó, era algo q solía hacer. Por la noche mandaría un mensaje diciendo que no tenía crédito, que estaba bien, que pasara por su trabajo.
Creo que sabemos bastante poco la una de la otra. Sin embargo el afecto es inmenso. En ocasiones llega hasta mi casa para pedirme un consejo, que le teja un suéter o que l acompañe a algún lugar. Se por su voz o sus mensajes cuál es su estado de ánimo y estoy segura que correría a mi lado si l onecesitará. Con eso basta.
Nos conocimos en un hospital hace 30 años. Ella esperaba a alguien y yo también. Siempre nos encontrábamos para la hora da la visita. Hasta que llegó al peso necesario para dejar la incubadora. Entonces mi pequeña hija y yo nos fuimos a casa.

Coctelera de chats - Dora

En estos tres meses el clima me acompañó, el cielo con un azul intenso, indescriptible, el sol lo hacía más intenso y brillante. Rodeada de pinceles, acrílicos, bastidor y atril pase las tardes, agradables, amenas, con los chats de mis amigos, mis seres queridos, que me cuidan y me retan: "no salga". A disfrutar de mi querido Castelar, a caminar por su calles tan frondosas y bellas con los colores del otoño y ahora con sus ramas desnudas. De la coctelera de chats, como escribió Darío, les mando lo que me parecieron más interesante: amiga enojada, un desastre. Siempre que la escuché ¡nunca aportó nada sensato!
¡¡¡Seguro que hablan, ella le va a estar encima de todo, ese fue el pacto!!! Acá son todos unos muertos. Qué querés que te diga. Van a terminar todos psicóticos! Propuesta entrañable: ❤️ ¡Terrible la nieve! ¡Me voy a ir a vivir ahí! Te venís conmigo❤️. Cumpleaños en cuarenta. Mi admirada Gladys, sos un tesoro de persona: bella, distinguida y con una energía contagiosa, además de excelente compañera. ¡Qué lindo haberte encontrado! ¡Lo mejor para vos! ¡¡¡Feliz cumpleaños!!! Me olvidaba lo más importante: ¡¡¡Que lo disfrutes!!!  Un sinfín de felicitaciones, halagos. Son caricias al corazón❤️.

Coctelera de chats - Lilian

Inexorablemente a fines de mayo llega el invierno a Castelar y empiezo a disfrutar los días soleados y azules. Sentir en la cara la caricia del viento, caminar ligero y pasear para volver al abrigo de mi casa, tal vez tirarme en el sillón a leer un rato, desparramar sobre la mesa mis útiles de dibujo y pintura o ponerme a terminar algún anillo o arito haciendo joyería. Esperar a mi marido para matear juntos y comentar lo que nos ha pasado, grabar alguna canción para mi grupo de canto y cuando se va yendo el día empezar a preparar ese puchero calentito.
Hoy, a cien días de esta cuarentena interminable, todos estos pequeños placeres van perdiendo sentido porque no vuelvo de ningún lado, estoy adentro y, a medida que pasa el tiempo, lo único que deseo es el abrazo de mi gente, mis hijos, mis amigos, las reuniones tocándonos, charlando, juntando juguetes que tiran mis nietos y sintiendo su piel cerquita. Soy optimista y sé que esto también va a pasar, pero ahora sólo se me ocurre una frase: “decile que extraño”.

Coctelera de chats - Osvaldo

HISTORIAS DE  WhatsApp 

¿Está nuestro vaso medio lleno o medio vacío? Podemos vernos como personas positivas, pero si nos tomamos un tiempo para examinar nuestros pensamientos de cerca, nos podremos sorprender. Podemos tener mucho para quejarnos, ¿y qué? Podemos elegir la desdicha o la felicidad. Todo depende de cómo veamos el vaso.
En lugar de pensar en las facturas pendientes, agradezcamos el dinero que vendrá. En lugar de pensar las actividades que nos estamos perdiendo en nuestras vidas, estemos agradecidos por la soledad. En lugar de estar dolidos por lo que nos hacen nuestros amigos o familiares, sintámonos bendecidos por tenerlos en nuestras vidas en primer lugar. 
Hoy me daré una lección de humildad, reconociendo mis bendiciones y tomando conciencia de que sin ellas estaría perdido.

Coctelera de chats - Fabiana

La fe es el pájaro que canta cuando el mundo está oscuro.
Ayer mí madrugada fue terriblemente oscura, sentí mucho miedo. Se prendió fuego el dúplex de al lado de mí casa. Salieron todos los vecinos a ayudarnos. Mi vecina perdió todo, nosotros sólo tuvimos algunos daños y la casa llena de hollín. Realmente tuvimos un ángel protector.
Pensaba parada en el medio de la calle, mientras las llamas se hacían cada vez más intensas qué frágiles somos, cómo la vida nos puede cambiar de un minuto para otro. Veía mí casa prendida fuego, pero no sólo eso: mis espacios, mis pertenencias, mis recuerdos, mis historias, mi sacrificio y el de marido de tantos años convertirse en cenizas.
Ayer hice catarsis con mis amigas. Hoy me levanté temprano y empecé a limpiar el hollín de todas las cosas de mí casa y ya se está pareciendo a la que con tanto esmero habíamos pintado y decorado aprovechando está eterna cuarentena.
La esperanza es desear algo, la fe es creer que va a suceder y la valentía es hacer que suceda y, mi familia y yo, si algo somos es valientes.

Reflexión final - Fabiana

Este año viví, y creo que no fui la única, todos los estados de ánimo. Tuve días de alegría, de esperanza, de paz, pero fueron muchos los qu...